II Blogtrip Cantabria Infinita - Encuentro de blogueros, Santander y Cabárceno (13/05/2011)

Tras la toma de contacto que habíamos tenido la noche anterior, éste era el día en que empezaba de lleno el blogtrip, en el que comenzaríamos a conocer alguna de las maravillas que esta tierra posee.

Pese a que en el planning inicial teníamos previsto visitar las cuevas de “El castillo” y reunirnos después con López Marcano, la apretada agenda del Consejero en estos tiempos electorales nos supuso un nuevo cambio de planes. Así que a las 9:15 h, tras un copioso desayuno, decíamos adiós al Balneario Solares, para trasladarnos al Museo Marítimo del Cantábrico, donde tendría lugar el Encuentro de blogueros de Turismo al que habíamos sido invitados.

El Encuentro de blogueros con López Marcano (Consejero de Turismo)

Al llegar allí nos recibieron diversos responsables de Cantur, la Sociedad Regional Cántabra de Promoción Turística, que se encargó en gran medida de la organización del Encuentro, y que nos trasladaron a la sala donde tendría lugar la charla con el Consejero, en el último piso del Museo, con la bahía de Santander como telón. Una vez llegó López Marcano, y tras realizarnos diversas fotos y entrevistas para inmortalizar el Encuentro en Telecantabria y El diario montañés, dio comienzo el coloquio.
Blogueros en el periódico de Cantabria


Durante el mismo el Consejero hizo gala de su dominio de las nuevas tecnologías de comunicación y redes sociales, pues cuenta con página de Facebook y Twitter con, al parecer, buen número de seguidores. Sin embargo, aprovechando la variedad geográfica de los blogueros que allí nos reuníamos quiso realizar el coloquio de una forma más distendida y participativa. Cada uno de nosotros le comentaba su nombre, el lugar de procedencia y la temática de su blog y él, demostrando el gran conocimiento del país y sobre todo, de su tierra, Cantabria, nos iba señalando qué cosas nos unían y en qué cosas nos diferenciábamos, intentando exponernos diversos motivos por los que visitar Cantabria. Nos comentó que esta comunidad posee una superficie tal (alrededor de 5.300 km2) que la hacen ideal para recorrerla durante tres días de estancia media, ya que las distancias no son excesivas. Sin embargo, a pesar de su escasa superficie, cuenta con un valiosísimo patrimonio subterráneo, con 6.400 cuevas, de las que 84 poseen arte rupestre, siendo 4 de ellas patrimonio de la Unesco. Asimismo, señaló la importancia de tener un Parque de la Naturaleza como el de Cabárceno, que cuenta con 750 ha y al que nosotros acudiríamos por la tarde.

II Encuentro de blogueros con López Marcano en Cantabria

En la charla estuvieron también presente un representante del balneario Puente Viesgo, que nos indicó de nuevo la importancia de las aguas termales en la Comunidad, un representante de blogueros cántabros, que nos dio unas nociones acerca de cómo se ha reintroducido el vino en la Comunidad, contando en la actualidad con 10 bodegas y 11 marcas, así como la representante de Ediciones Tantín que promocionaba el libro “Cuarenta leguas por Cantabria”.

Recorriendo Santander. Nuestra ruta por la ciudad:

Al finalizar el coloquio, cada uno marchamos a seguir con nuestros respectivos planes. Dadas las horas que eran debíamos omitir la visita de las cuevas de “El Castillo” y en su lugar hicimos una ruta por Santander, comenzando con una visita guiada por el Museo Marítimo del Cantábrico, donde nos encontrábamos, que me pareció realmente interesante.

En orden inverso al habitual, ya que íbamos de arriba abajo, comenzamos nuestra ruta por la tercera planta. En una primera zona dedicada a la pesca pudimos observar esquemas de las diferentes técnicas empleadas (con una mención especial al arrastre, hoy en día prohibido), maquetas relativas a las técnicas de construcción de barcos, al estilo de vida de los pescadores (sus ropas, costumbres, aparatos, etc) y las diferentes técnicas de conservación del pescado.

Ancla romana del Museo Marítimo del Cantábrico, SantanderDesde allí se pasa a una segunda zona dedicada a la historia. Se nos enseñó que la ciudad de Santander era un importante puerto ya en época romana, aunque denominada en aquel entonces Portus Victoriae (Puerto de la Victoria). Pero no era el único, sino que existían diversos puertos a lo largo de la cornisa Cantábrica. Buena prueba de la ocupación romana de la zona es el ancla (romana) que en una de sus vitrinas se exhibe. Poco después, paneles explicativos muestran la evolución de estos puertos hasta convertirse en las actuales instituciones y gremios de pescadores.

Se realiza mención especial sobre personas naturales de la zona que han sido realizado importantes proezas como Juan de la Cosa, un navegante cántabro que participó en diversos de los primeros viajes a América y que dibujó el mapa más antiguo conservado del continente americano, cuya copia se expone allí, o la Expedición científica Malaspina – Bustamante, que partió en 1789 hacia sudamérica, recorrió el pacífico americano, cruzó el pacífico deteniéndose en diversas zonas de Asia y Ocenía, para regresar en 1794 con multitud de especies biológicas y observaciones (cartas náuticas, etc) desconocidas hasta la fecha.

Expedición científica Malaspina – Bustamante, Museo Marítimo del Cantábrico, Santander

También hay paneles informativos del suceso que en 1893 provoco la muerte de 590 personas y cerca de 200 heridos en la ciudad de Santander. La explosión del barco “Cabo Machichaco”. En el barco se declaró un incendio pero durante las labores de extinción estallaron 51 toneladas de dinamita, provocando una de las mayores catástrofes que haya vivido la ciudad.

En la planta baja tuvimos ocasión de observar los esqueletos originales de diversos cetáceos y ballenas. Impresionante los cerca de 25 m de un Rorcual Común que presiden la sala principal, o los del cachalote, recogido frente al cabo mayor de Santander en 1894 o el de la ballena picuda que se encontró a la deriva frente a la bahía de Santander, expuestos a ambos lados del rorcual. El guía nos explicó la diferencia en las mandíbulas de las distintas especies, mientras las ballenas tienen barbas (que podíamos ver expuestas en diversas cristaleras de la sala), los cachalotes son especies dotadas de dientes. La diferencia en sus mandíbulas era notable.

Esqueletos en el Museo Marítimo del Cantábrico, Santander

Aunque no pudimos verla porque no se encontraba expuesta en el momento de nuestra visita, en esta planta se expone también una sardina con dos cabezas, algo que debe ser realmente curioso.

Para finalizar nuestra visita nos adentramos en el último nivel, el acuario. Allí coexisten diversas especies del Mar Cantábrico: serpetas (similar al caballito de mar), morenas, mantas, merluzas, rapes, pargos, etc.

Acuario en el Museo Marítimo del Cantábrico, Santander

Tras haber visitado el museo marítimo de Liverpool, he de decir, que éste (el de Santander) me gustó mucho más, y con una visita guiada se pueden aprender bastantes cosas. Además es interesante también para acudir con niños.

Tras esta interesante visita nos metimos de nuevo en el autobús de camino a la Península de la Magdalena. De camino pudimos observar algunas de las hermosas playas de la ciudad: los Peligros, la playa de los bikinis (bautizada así ya que fue en esta playa en la que se utilizó por primera vez la famosa prenda por parte de alumnas de la UIMP extranjeras) y la playa del Camello (con una roca en su centro que se asemeja al citado animal y a la que debe su nombre).

Aunque si algo sorprende en esta península es el palacio que alberga, construido con un presupuesto de setecientas mil pesetas pagadas en su totalidad por los santanderinos fue cedido al rey Alfonso XIII, que lo utilizó como residencia de verano en compañía de su esposa, la reina Victoria Eugenia. Con ese uso permaneció hasta 1932 cuando el gobierno republicano instaló allí la Universidad Internacional de Verano. Tras la guerra civil la Casa Real ofreció el edificio a la Universidad Internacional Menéndez Pelayo y finalmente lo vendió al Ayuntamiento de Santander por 150 millones de pesetas.

Palacio de la Magdalena, Santander

Palacio de la Magdalena, Santander

Desde la cima, bajamos andando observando las vistas de la Isla de Mouro y los acantilados de la propia península, dejándonos llevar por el precioso entorno verde de la zona. Tras observar las tres carabelas que utilizó Vital Alsar, el navegante cántabro que rememoró el viaje de Francisco de Orellana en el Océano Pacífico, llegamos a un pequeño zoo al aire libre en que pudimos ver pingüinos, focas y leones marinos, además de unas preciosas vistas de las playas del Sardinero.

Isla de Mouro en Santander

Zoo en la Península de la Magdalena, Santander

Zoo en la Península de la Magdalena, Santander

Cogimos de nuevo el autobús y tras pasar frente a la Playa de la Concha llegamos a los Jardines Piquio, un pequeño promontorio que separa las dos playas del Sardinero, aunque cuando la marea baja ambas playas se unifican y es posible pasar de una a otra.

Con esta visita rápida a algunos de los atractivos de Santander, nos fuimos a comer. El restaurante Tonino fue el que nos acogió esta vez y nos permitió degustar mariscos y pescados dignos de los mejores paladares: anchoas, boquerones, rabas, navajas o machote fue alguno de los platos con los que nos obsequiaron, aunque si queréis un ejemplo gráfico, María Ángeles los comenta a las mil maravillas en Sabor Gourmet.

Visita del Parque Natural de Cabárceno:

Por la tarde el Parque Natural de Cabárceno nos esperaba. Parece mentira que a tan sólo 15 km de Santander, en el lugar que antaño era una mina de extracción de hierro, se encuentre un espacio de aproximadamente 750 ha con animales de los cinco continentes en semilibertad.

A través de más de 20 km de carreteras se puede acceder a los diferentes recintos atravesando desfiladeros, lagos y paisajes kársticos de color ocre, verdaderamente bonitos.

Como el tiempo apremiaba, Henar, nuestra guía, nos llevó directamente a los sitios más interesantes del parque.

En primer lugar paramos en el recinto de los tigres y el de los gorilas. Precisamente éstos últimos son uno de los habitantes más famosos de Cabárceno, ya que tienen el recinto al aire libre más grande que existe en España para esta especie. Lamentablemente, cuando llegamos a verles, Nicky, Nadia y Chelewa ya se encontraban en el interior del recinto (donde duermen) y les vimos a través de unas cristaleras.

Tigres en el Parque Natural de Cabárceno, Santander

Gorilas en el Parque Natural de Cabárceno, Santander

Seguimos la ruta viendo el enorme recinto de los osos pardos, y es que este parque cuenta con la mayor reserva de osos pardos de Europa, con alrededor de setenta. No tengo palabras, me encantaron.

Osos en el Parque Natural de Cabárceno, Santander

Osos en el Parque Natural de Cabárceno, Santander

Osos en el Parque Natural de Cabárceno, Santander
Los osos ¿amorosos?

Jirafas, elands (el antílope más grande de África) y avestruces compartían recinto frente a los osos. Aunque algún osado sevillano se atrevió a tocar un eland, cuando un avestruz vino hacia nosotros, todos salimos por patas…

Jirafas en el Parque Natural de Cabárceno, Santander

Seguimos viendo bisontes, una especie sobre la que existe un programa específico de reproducción debido a lo amenazada que se encuentra, y continuamos con los elefantes africanos. Al parecer, todo el zoológico de Madrid cabe en el interior del recinto dedicado a los elefantes, que cuenta con trece ejemplares.

Ciervos, corzos, jabalíes, hipopótamos (pigmeos y grandes), hienas, cebras, camellos y dromedarios, llamas, rinocerontes, un sinfín de especies se concentran en este parque, digno de visitar con más tiempo del que disponíamos.

Dando un paseo nocturno por Santander

Al finalizar la visita, nos trasladaron al Hotel Bahía, donde estaríamos alojados el resto del fin de semana. Después de pegarnos una ducha, Fran, María Ángeles, Helen y yo decidimos ir a dar una vuelta por el centro de Santander. Comenzamos por la plaza Porticada con Caja Cantabria y el monumento a Velarte, el Mercado del Este, llegamos hasta Puertochico callejeando y descubriendo los múltiples bares de tapas con los que cuenta la ciudad y volvimos por el Paseo de la Pereda.

Santander

Nos acercamos también a ver los monumentos erigidos en las cercanías de nuestro hotel para rememorar las dos catástrofes sufridas en la ciudad: una cruz en cuyo reverso está inscrita la fecha 3 de Noviembre de 1893 y en el anverso 21 de marzo de 1894, que rememora las sucesivas explosiones del Barco Cabo Machichaco, y las esculturas del interior de la rotonda que rememoran el incendio que asoló la parte histórica de Santander en 1941. Aunque tan sólo hubo una víctima, muchas fueron las familias que se quedaron sin hogar. El incendio destruyó el casco antiguo y por este motivo todas las construcciones de Santander datan de una fecha posterior.

Por último y justo antes de volver al hotel donde nos encontraríamos con nuestros compañeros para ir a cenar, nos acercamos a la Catedral, que tiene una bonita iluminación nocturna.

Santander

La cena fue en el restaurante Sixtina. De nuevo me quedo sin palabras, no recuerdo haber probado unas croquetas así de buenas en mi vida. Pero no fue lo único exquisito: gazpacho de fresas, ensalada de foi, risoto, steak tartar… una maravilla. En el relato de Sabor Gourmet, una imagen vale más que mil palabras.

Y aunque algunos valientes se quedaron a tomarse una copilla por el centro, yo estaba bastante cansada y regresé con Helen y Mercè al hotel. El día había transcurrido de una gran manera, pero la mañana siguiente habría que madrugar, así que ¡a recargar pilas!

Nota: Si nos queréis ver en Telecantabria, salimos entorno al minuto 12

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Helena - Mimaletayyo

Ingeniero de caminos de profesión, la pasión por viajar y su curiosidad por conocer mundo ha hecho que dedique parte de su tiempo a ello. Entusiasta por conocer vestigios de antiguas culturas y civilizaciones, pero también naturaleza y modo de vida actual.

11 comentarios:

  1. A esto le llamo un buen resumen del segundo día de blogtrip. Has detallado perfectamente nuestras andanzas. Enhorabuena!!
    Un abrazo

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  2. Buenas Helena! que envidia de la sana que me estáis dando todos!! Yo no he tenido la suerte de participar en ningún blogtrip pero se ve que es una experiencia muy buena y única. Cantabria es una asignatura pendiente ya que no conozco mucho de la zona, aunque con los últimos reportajes que estoy leyendo de la gente que habéis ido... va a ser como la visitara.

    La verdad que está muy bien que los ayuntamientos se fijen en blogers para promocionar su tierra. Todo un acierto a mi entender.

    Un saludo!

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  3. ¡Hola a todos!

    - Fran, me alegro de que te haya gustado. Esperaba un comentario tuyo acerca de los osos, jejeje...

    - Aniña, muchas gracias por pasarte por aquí y animarte a comentar. Me alegro de que te hayan gustado las fotos, pues no suelen ser mi punto fuerte

    - Víctor, si hace nada has estado en Fuente Dé... Fíjate, ese es uno de los sitios a los que me hubiera gustado ir. Las fotos de los folletos parecen preciosas. Opino como tú en cuanto a los blogtrips, y más hoy en día que todo lo buscamos a través de internet

    Un saludo

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  4. Hola Helena,

    Perfecto el relato de Santander, con el Palacio de la Magdalena, visita obligada, la Playa del Sardinero con su bonito paseo, Cabárceno, animales en estado puro, así como el paseo por el centro de la ciudad.
    Saludos.

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  5. Buen resumen, vaya memoria tienes que te acuerdas de todas las anécdotas que nos contaron.
    Tienes madera para posar en los periodicos :D

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  6. Hola Helena, me encanta leer todas las entradas que se han escrito sobre el viaje. Agitándolas todaas en la coctelera sale como dice machbel un buen resumen.
    el viajero impresionista

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  7. Víctor, se nota que conoces bien la zona, ¿eh? Estuvo muy bien el día, aunque la comida duró mucho y estuvimos menos tiempo del deseado en Cabárceno. Un saludo

    Machbel, ahí chupando cámara ¿eh?. No veas el cachondeo que lleva mi familia y amigos con ese primer plano... aunque les digo que era porque estábamos en semicírculo, no hay forma...

    Hola Marc, todo un halago proviniendo de un escritor como tú. Un saludo

    Viajero Impresionista, sí que es cierto. Es curioso ver cómo plasmamos cada uno el viaje en nuestros blogs...

    Un saludo a todos.

    Perdonad que no os haya respondido antes pero blogger está teniendo problemas con los comentarios. A ver si se soluciona pronto.

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  8. He ido varias veces a Cantabria, pero nunca he estado en el Parque Natural de Cabárceno... Ya tengo excusa para volver! No sabía q en un sitio así habría animales de los cinco continentes casi en libertad!!!
    Saludos

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  9. Hola M.C.
    Pues ya tienes excusa para volver... ¡Hombre! Lo de semilibertad es por lo grande de los recintos de los animales, y la verdad es que el entorno es muy bonito también.
    Un saludo ;)

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